"EL PROFE DE GIMNASIA"...

Prof. Luis Rodriguez

Tenías ganas de escribir y me he puesto a ello, se que me pongo muy sentimental pero es lo que ahi, quizás los recuerdos me hacen ser así, pero tiene que haber de todo jajajajaj.

Quería, en otro de los huecos que hablamos de nuestro corazón y en el que todos tenemos uno en común, "el colegio". Buenos y malos momentos, pero sobre todo lo que más hicimos fue deporte. Algunos lo llevaban realmente mal, otros por el contrario era el momento de abstraerse de todo y foguearse haciendo lo que más le gustaba a uno, jugar al futbol; otros en el gimnasio con los aparatos , otros sin aparatos, " en las gradas jajajajaj", dichosas gradas.
Competiciones entre las clases con sus correspondientes piques, juegos de la Salce, partidos contra los eternos rivales, el Virgen de Mirasierra, Valdeluz etc......que buenos momentos.
Pero si nos paramos a pensar en todo este maremagnun de equipaciones, balones, partidos etc, estaba nuestro "profe de gimnasia", Luis Rodríguez.

Que no tenías oxigeno para seguir Luis te lo proporcionaba, con un "vaaaaaammmmmoooossss", que no llegabas a tocar la viga subiendo la cuerda, ahí estaba Luis ahí , si ahí abajo cualquiera se daba por vencido jajajajaja, tu vertigo se había quedado en el vestuario. ¿No sabías cuanto escalones tenían las gradas?, pues entre subir y bajar aproximadamente unos 3000 escalones más que el Calderón y el Bernabeu juntos.

Bromas a parte, gracias a él , ahora muchos de nosotros sabemos apreciar que para hacer deporte no basta con ponerse una camiseta chula, o unas zapatillas superfly con colchón de aire etc., no, para él siempre ha sido que todo se puede lograr en esta vida si te lo propones, pero eso sí, con esfuerzo; la vida no regala nada, hay que ganárselo. Ese fue mi aprendizaje durante los años que tuve el placer de tenerle como profesor de educación física y como entrenador, y actualmente como amigo. Otros como Camacho se dedica a entrenar a chavales y aplica muchas de las enseñanzas que recibió en su momento, obteniendo lo mejor de cada chaval como jugador y como persona.

Estos renglones no son para regalar el oído a nadie, simplemente queremos agradecer a nuestro "profe" todo lo que ha hecho por nosotros,  le estamos y le estaremos agradecidos por muchas cosas: por el tiempo que nos dedicó y no pudo dedicárselo a su familia con los partidos de fútbol, por enseñarnos otras cosas de la vida, que no estaban al alcance de nuestros padres y sobre todo a hacer grupo y ser amigos de nuestros amigos.

Cuando nos poníamos la camiseta de fútbol del Salleko, él te hacía sentirte especial, como si fueras uno de los elegidos, pero a la vez sabías que no podías fallar porque eras del Salleko, era algo que a día de hoy inculco a mi hijo, que por suerte escogió el deporte que a mí me gusta, el fútbol, sin yo decirle nada. Sólo le aplico lo que me han enseñado, esfuerzo y disfrutar haciendo el deporte que te guste.Nadie es mejor que nadie, solamente es cuestión de proponérselo y sobretodo divertirte.

Nos hemos encontrado después de años de no saber nada unos de otros pero hoy de nuevo estamos conectados y esperemos que estos lazos duren en el tiempo, que estoy seguro que así será.
Le he pedido fotografías de su etapa como atleta, y aún me acuerdo de los juegos del mediterráneo, que ganó una medalla e imaginaros como molaba, cuando decías que tu "profe" de gimnasia había sido medalla en unas olimpiadas.

Resultado de esfuerzo, compromiso, seriedad y sobre todo haciendo las cosas con el corazón:
una gran persona con una gran familia.

 

Simplemente espectacular, es un orgullo para todos nosotros el haberte tenido como "profe de gimnasia" durante una gran parte de nuestra vida , solo felicitarte Luis por haber hecho tanto por nosotros, pero sobre todo dar las gracias a tu mujer Mariluz por haber permitido compartirte en muchos momentos. Felicitaros a los dos por habernos dado un trocito de vosotros a lo largo de una parte de vuestra vida.
Y a tu familia decirles que se pueden sentir orgullosos de su padre y abuelo porque estas entre los mejores, aunque aquí no se den medallas, solo damos abrazos.

Un amigo de parte de otros